El pirarucu, un pez gigamte para salvar el Amazonas


Jacinto Antón 21 DIC 2019-21: El pais
Traduccion de: Hugo P. Castello, Fundacion Felix de Azara

En el camino a la reunión con João Campos-Silva me encuentro con una sucuri. Es muy activa, saca la cabeza del agua como si estuviera persiguiendo a una presa y me mira con los ojos en blanco mientras desliza sus anillos alrededor de una rama hundida. No es común encontrar una sucursal del Amazonas en Barcelona un miércoles al mediodía, pero conversé con el biólogo y conservacionista brasileño en el bosque inundado de Cosmo Caixa, el espacio realista del museo que reproduce la selva amazónica, y aquí tiene todo : hormigas cortadoras de hojas, capibaras, caimanes, aves tropicales, etc.
Además, cada 15 minutos llueve. Sin lugar a dudas, Campos-Silva se siente como en casa y es mucho más fácil de encontrar aquí que en sus áreas de investigación del río Juruá en el oeste del Amazonas, que están más lejos.
 Campos-Silva y un colaborador miden la longitud de un arapaima en la Amazonía.Foto Vicens Giménez.

Campos-Silva (Piedade, São Paulo, 1983) fue famoso por su relación con un pez gigante, el arapaima, también llamado pirarucu, a cuya preservación dedica sus esfuerzos. El arapaima (Arapaima gigas) es el segundo pez de agua dulce más grande del mundo, justo detrás del esturión beluga (alabado por sus huevas), y es realmente el más grande si consideramos solo los peces escamosos de río . Carnívoro, el pez es un animal imponente que supera los tres metros de longitud y pesa hasta 250 kilogramos. Además de sus características curiosas: la necesidad de sacar la cabeza para respirar, el macho toma los alevines en la boca y los padres cuidan de los jóvenes: el pirarucu, cuyo crecimiento es muy rápido, podría ser la clave para la supervivencia del Amazonas. y este es el enfoque del trabajo del biólogo brasileño, que ha ganado varios premios, incluido el Premio a la Iniciativa Empresarial Rolex 2019.
De una manera que puede parecer paradójica, el proyecto no se centra en prohibir el pirarucu, cuyas poblaciones han sido diezmadas en muchos lugares, pero en su captura sostenible. Campos-Silva explica esto mientras paseamos por el falso bosque sudando en abundancia y después de ver nadar a varios peces amazónicos, incluidos varios pirarucus, que el naturalista saludó con emoción.
El ambiente es tan realista que casi esperas escuchar el golpe de una cerbatana o tropezar con una onza, especialmente debido a las historias que el erudito cuenta sobre su vida diaria en el bosque.
"El arapaima se encuentra en una interesante encrucijada de diferentes vectores", dice Campos-Silva, un joven amable y amigable que tiene un tatuaje de paz de los indios Desana en su antebrazo.
Enumera: "La extinción global de la megafauna debido a la falta de espacio, la conservación de la biodiversidad y la posibilidad de mejorar la vida de las personas de los alrededores manteniendo vivo el bosque".
Arapaima, continúa, fue sobreexplotado en el siglo pasado hasta casi la extinción, pero la respuesta de las comunidades indígenas, que se organizaron para protegerlo en su territorio, ha hecho que los peces se recuperen bien y abundan en estos lugares, donde está monitoreado “las 24 horas del día, los siete días de la semana” para que no haya caza ilegal o ilegal.
Hay una cuota de captura y continuamentese realiza un censo. En la temporada de lluvias, dice el biólogo, cuando el bosque se inunda, el pirarucu puede moverse a otra parte y recolonizarlos, causando un aumento global de la especie. "Algo que termina beneficiando a muchas otras especies". El pez, segun Campos-Silva es un animal imponente que supera los tres metros de longitud y pesa hasta 250 kilogramos. Campos-Silva, que pasó por Barcelona para enseñar en la Universidad Autónoma, es muy crítico con el gobierno de Jair Bolsonaro con respecto a la Amazonía.
Llegó a la región hace 12 años para estudiar paseriformes de aves y descubrió la importancia y las posibilidades del pirarucu. Comenzó a trabajar con comunidades indígenas en el estado de Amazonas, para las cuales el pescado no solo es de importancia económica sino cultural.
Es un pez "muy emblemático", destaca, incluso totémico, con gran importancia, por ejemplo, en la cosmología Deni, los principales pueblos indígenas de la región, compuesta por más de 600 tribus.
Su pesca "es muy difícil, se hace con arpón y es necesario conocer la técnica que aprenden de los niños".
¿Es un animal peligroso? Con ese tamaño y esos dientes ... “No, la mordida es grande, pero nunca he oído hablar de ningún accidente humano.
La pesca, sí, es un desafío ”. Las comunidades obtienen un beneficio de la pesca que revierte a su calidad de vida y a la preservación de los peces.
"Gracias a los peces y los ingresos que proporciona, reducen los casos de cáncer y ataques cardíacos a la capital, Manaus, y se salvan vidas".
El biólogo Campos-Silva. Foto: cens Giménez.

El pirarucu es bueno, gastronómicamente hablando? “Su carne es muy buena, firme, de color blanco rosado, sin huesos. Tiene un sabor ligeramente diferente al del pescado típico. El Arapaima salado parece bacalao. Pero no fresco. Fuera del Amazonas no es muy común comerlo, pero ahora estamos tratando de exportarlo no solo al resto de Brasil, sino a otros países ”.
El precio es de 1,50 euros (unos 6,82 reales) por kilo al menos en la fuente.
“Si queremos asegurar la conservación del bosque, necesitamos vender más pirarucu a un mejor precio; La exploración actual es pequeña, alrededor del 25% de la posible ". Actualmente, 2.500 personas protegen más de 3.000 lugares con una población de pirarucus.
La carne no es lo único que se explota en el pescado. “La piel, fuerte y flexible, es muy valiosa, se usa para hacer botas. Estamos tratando de crear un mercado ”.
Con respecto a la posible contradicción de la pesca de pirarucu para salvarlo, Campos-Silva dice que no es así y recuerda el dicho“ Úselo o piérdalo ”, utilícelo o piérdalo.
El biólogo, que también cree que prohibir la caza en el Amazonas es "como vendarse los ojos para no ver la realidad de las necesidades de las comunidades indígenas", reconoce que en muchos de estos temas existen conflictos con los conservacionistas y los defensores de los animales más radicales.
“Para ellos, la conservación es algo al final del camino, para nosotros es el camino. Los proyectos y políticas de conservación deben tener sentido para las comunidades que viven en la Amazonía, deben darse cuenta de que la conservación mejora sus vidas.
El mayor desafío es conciliar la conservación de la biodiversidad con el bienestar de las poblaciones ".
Vista de un asentamiento local en laAmazonía. Foto: Vicens Giménez.
La pesca de Pirarucu, según Campos-Silva, tiene muchos beneficios sociales, algunos inesperados, como la contribución, dice, a la igualdad de género. “Ahora, con los proyectos de pesca, las mujeres tienen un papel específico en el manejo de los peces y reciben un ingreso, lo que cambia el sistema patriarcal que prevaleció en la Amazonía. Además, la autoestima de las comunidades, tradicionalmente olvidadas por el Gobierno y que se vuelven autónomas, está creciendo ”. En la actualidad, 500 comunidades ya han ingresado al proyecto, cubriendo un área de 1,600 kilómetros cuadrados.

Campos-Silva en una jornada laboral. Foto: Vicens Giménez-
Cuando se le pregunta sobre la aventura personal de estar continuamente en el bosque, el biólogo revela un tesoro de experiencias sensacionales.
¿Hay onzas? “Sí, pero más en tierra que en áreas inundadas. Mayor peligro significa el cocodrilo negro, que puede alcanzar los cinco metros y provocar un accidente. Un dia fuimos atacdado y voloel bote, fuimos nadando a la orilla. Afortunadamente, no nos persiguió.
¿Dios y serpientes? “Un amigo fue mordido por uno cuando estábamos en el bosque. Lo cargué sobre sus hombros durante aproximadamente una hora hasta que llegamos a un punto donde podríamos ponerlo en un bote por el río y, después de 10 horas, llegar a la ciudad.
Casi pierde la pierna ”. La serpiente, explica, era una surucucu, una víbora muy peligrosa. “La vimos bien, porque cuando ella lo picó, mi amigo la mató con el machete. Fue horrible, se congeló, gimió de dolor y sus encías sangraron. Pensé que iba a morir. Se ha recuperado bien, pero ahora siempre mira al suelo mientras camina.
En cuanto a las pirañas, explica que el pirarucu desarrolló las escamas precisamente para protegerse de ellas.
Él dice que gran parte de lo que se dice sobre las pirañas es cierto. Vio un cardumen de pirañas comerse un perro al otro lado del río. “Fue impresionante, el perro aulló y el agua a su alrededor burbujeó roja de sangre. Hay muchos accidentes de pirañas. Señala su pie izquierdo. "Uno me mordió y ella se comió un pedazo de mi dedo, un corte limpio como tijeras". ¡Dios! ¿Le dolió ?, le pregunto mientras evalúo si ya tenemos suficiente confianza para pedirle que se quite los zapatos y me lo muestre. Fue horrible y no paró de sangrar; pero me puse el mejor cicatrizante: grasa de la sucuri.

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