Una táctica que podría acabar con los ataques de tiburón.

Traducido por  Hugo P.  Castello,  2014.  MACN: en comisión en la Fundación de Historia Natural "Félix de Azara".

por Stephanie Pappas, Live Science Contributor,  August 07, 2014

 Los investigadores restringen un tiburón tigre de la costa de Australia. 

Según una investigación reciente, un programa que atrapa y libera tiburones potencialmente agresivos aguas afuera de la costa de Recife, Brasil, ha reducido los ataques de tiburones en los seres humanos en un 97 por ciento.

Implementar tácticas similares en otras áreas donde los tiburones y los nadadores se mezclan también podría reducir los ataques de tiburones, mientras  se protege a los animales, dicen los científicos.

En los últimos meses, ha habido grandes protestas contra los programas que implementan la muerte de los tiburones, particularmente en Australia.
"Con una protesta de 50.000 personas en Australia Occidental contra los métodos letales [de control de tiburón], esta es una excelente noticia", dijo David Shiffman, estudiante de doctorado en la Universidad de Miami que estudia la ecología de tiburones, pero no participó en el proyecto de Recife.

Pánico por el ataque de tiburón
Los ataques de tiburón son extremadamente raros, con sólo alrededor de 50 a 70 ataques a personas por año en todo el mundo, de acuerdo con el Museo de Historia Natural de Florida. De ellos, sólo unos pocos son mortales. Entre 2006 y 2010, un promedio de 4.2 personas por año murió a causa de los ataques de tiburones a nivel mundial, de acuerdo con la organización de conservación sin fines de lucro Oceana.

Sin embargo, los tiburones engendran miedo, y un solo ataque puede hacer daño el turismo en zonas de playa. Como resultado, los funcionarios locales a menudo sienten la necesidad de hacer algo acerca de los tiburones. Humberto Hazin y Andre Afonso, investigadores de la Universidad Federal Rural de Pernambuco, publicaron un artículo en la edición de agosto de la revista Animal Conservation.
Recife, que se encuentra ubicada en la costa del estado nororiental brasileño de Pernambuco, vio un repunte repentino de ataques de tiburones a seres humanos a partir de 1992, después de la construcción de un complejo al sur del puerto de la ciudad costera. Los investigadores sospechan que el puerto habría interferido con el  hábitat del tiburón, empujando a los animales en las aguas de recreo al norte del puerto. Cualquiera sea la razón, hubo 55 ataques de tiburones a humanos entre 1992 y 2011, el 36 por ciento de los cuales fueron mortales.

Solución para los tiburones
En 2004, el gobierno del Estado de Pernambuco instituyó un programa para mitigar el problema de ataque de  tiburones.

Muchas zonas alrededor del mundo utilizan medios letales para controlar los tiburones, a menudo mediante el sacrificio de ellos. Otra estrategia popular implica el despliegue de las redes de enmalle que para enmallar a  los tiburones, que a menudo los mata  por asfixia.

Las redes de enmalle se utilizan en Sudáfrica y Australia, pero también tienden a atrapar a otros animales marinos, como los delfines, tortugas marinas y peces.

Los conservacionistas se oponen a estos métodos letales, ya que un tercio de las especies de tiburones y rayas están amenazadas de extinción.
Funcionarios en Pernambuco eligieron otro camino: Desplegaron líneas de pesca enrrolada a un gran tambor flotante y largas líneas de pesca (longlines) con cebo en  múltiples anzuelos fuera de las zonas de baño de Recife. La tripulación de un barco comprobó las líneas con frecuencia para eliminar los animales enganchados en los anzuelos. Especies de tiburones potencialmente peligrosos - incluyendo tiburones tigre, tiburones de punta negra en la aleta dorsal , tiburones toro y tiburones martillo – fueron removidos de estas líneas, cargados en tanques de agua salada en el barco, y llevados a  aguas más profundas lejos de las playas, y puestos en libertad.

Durante los 73 meses, que el programa estuvo activo, 1.121 animales fueron capturados. fueron teleósteos o peces de escamas .Un total de 59% de las capturas, y el 40 % fueron  tiburones, rayas y sus familiares. Unas pocas tortugas marinas, que representaron aproximadamente el 0,8 por ciento de la captura, también se engancharon.
De los animales capturados 7% eran tiburones potencialmente peligrosos, en su mayoría tiburones tigre y tiburones toro. En general, el 60 %  de estos tiburones potencialmente peligrosos sobrevivió su-captura y liberación, y el 78 por ciento de todos los animales enganchados sobrevivió a la experiencia. Lo más alentador, sin embargo, fue que no hubo muertes de especies marinas protegidas.

La protección de los bañistas
El programa también pareció funcionar para los nadadores. Entre 1992 y el comienzo de la pesca de tiburones en 2004, la zona de Recife promedió 0.289 ataques de tiburones al mes, o hasta 10 en cada año. Cuando la pesca de tiburones de captura y liberación (con líneas largas  y líneas de tambo) estuvo activo entre 2004 y 2011, ese número se redujo a 0.014 ataques al mes - de hecho, sólo hubo  un ataque durante los meses que la pesca estuvo activa.
En ese período, el programa fue interrumpido varias veces debido a la falta de financiación, lo que resulta en 23 meses entre 2004 y 2011, cuando no había tiburones pesca en aguas de Recife. Durante estos meses, los ataques volvieron a subir a un promedio de 0.435 por mes.

Este rebote sugiere que fue la captura y liberación que marcó la diferencia. Hubo 97 %o menos de ataques de tiburones durante la pesca activa, en comparación con el período en cuando no había intentos de control de tiburón.

La estrategia de Recife no es probable que funcione en todas partes, dijo Shiffman, quien escribió un editorial que acompaña al estudio. Diferentes especies y ecosistemas diferentes responden de manera diferente a este tipo de programas, le dijo a Live Science. Sin embargo, se encontró que los resultados eran alentadores.
"Creo que vale la pena intentarlo", dijo. "Creo que probablemente debería ser probado en otras regiones, y en algunas de ellas, puede funcionar muy bien." .